Squall

Squall
Un músico de talento, una belleza sin igual, un amor indestructible, una muerte para los dos. De entre la oscuridad despertó y un nuevo camino empezó.

miércoles, 18 de junio de 2008

Encuentro

-Que frío…- me cubrí con mu chaqueta cuando el viento sopló contra mi resina al andar por las enormes calles.

De repente me detuve delante de un aparador, tan grande que no alcanzaba a ver la parte más alta, pero no me hacía falta, cuando vi lo que había en la parte inferior, me quedé helado.

Pequeñitos, colgados de mayor a menor, estaba todo un arsenal de preciosos y delicados instrumentos de cuerda, violines, violas, cellos, y una especie rara que debajo ponía: “guitarra eléctrica”.

No me lo pensé ni dos veces, cuando la puerta de la tienda se abrió entré a hurtadillas en su interior. Me acerqué al escaparate con sigilo. Al final llegué junto a los instrumentos y los observé con admiración y melancolía.

Cogí uno con rapidez y me fui. Lo guardé en su funda y me lo llevé al bosque. Tenía la intención de probarlo, necesitaba volver a oír sus notas de gran belleza entre mis dedos.

-Hola chico, ¿Qué tal el paseíto?- preguntó Marina cuando llegué a casa.

Escondí mi violín rápidamente, ella aún desconocía mi pasado y no tenía ganas de pensar en él ahora.

-Perfecto.- la verdad es que perfecto era poco, estaba más feliz que nunca en aquel momento.

-Muy bien, hora te toca hacer tu cuarto, que no se qué haces chico pero eres un desastre con el orden.- la miré de reojo y fui a hacer lo que me pedía.

A la mañana siguiente volví a salir, y la otra y la otra. Normalmente salía, a no ser que nos fuéramos a algún sitio. Un día conocí a más personas como yo, no con la misma historia, pero que estaban atrapados en este mundo, algunos que ya habían nacido aquí, otros que habían sido creados por el hombre y muchas otras historias parecidas.

Entonces empecé a ser una persona distinta, y un poco más feliz. Pero felicidad nunca tuve, hasta un día.

Una mañana en el bosque, mientras practicaba y paseaba, me encontré con un individuo muy curioso.

Estaba sentado en un tronco tocando tranquilamente cuando oí ruido entre las hierbas, pero no le hice caso. Al cabo de un rato me encontré agotado de practicar con la espada y todo, así que me estiré y me dormí.

De repente, abrí los ojos porque un ruido a mi lado me despertó. Descubrí un chiquillo de unos 16 o 17 años curioseando mi violín. Lo miré sin saber que decir hasta que se giró y me vio.

Se quedó pillado un momento, aún con las manos en mi violín. Llevaba unas ropas que parecían del siglo XIX, con un babero y una chaquetita negra. También su pelo era negro, largo y liso, recogido en una coleta sobre el hombro. El flequillo le tapaba un ojo, de un verde oscuro, tristes e inocentes. Me miraban con sorpresa, parecía que en ellos se escondía una triste historia, y mi corazón se ablandó ante aquella belleza y mirada de soledad…

-¿Qué haces aquí?- dije al fin, intentando hablar con serenidad y sarcasmo.

Abrió la boca para hablar pero no dijo nada, intentó de nuevo pero igual. Al final dijo.

-Lo siento, no era mi intención despertarle, ni robarle, tan solo…- miró sus manos donde reposaba el violín y suspiró.

-Bien, tranquilo. Entonces vete, lárgate por favor. A, y deja mi violín en su sitio.- me arrepentí al instante de haber pronunciado esas palabras, en el fondo no quería que se fuera, era alguien como yo, perdido y encima muy bello.

-Bien, siento haberte molestado. Por cierto, -se giró cuando ya se iba.- tocas muy bien.

Se perdió entre las hojas. Me quedé unos minutos con la vista perdida donde su delgada y bella figura había desaparecido, pero me obligué a mi mismo a no pensar en él.

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Cain Hagreaves

Cain Hagreaves
por las calles de Londres por la noce, asistiendo a fiestas y bailes...aquella mezcla entre angel i diablo k fascinaba a todos. igual k siempre...con su sonrisa distinguida.

"cuando llora, siento que el aire esta cargado con una sensación de tristeza. Y eso da alas a mis pies. Le he encontrado...señor Cain" "Perdóneme por fabor señor Cain. No podré acompañarle al infierno."(God Child)